Los inversionistas con conocimientos suficientes pueden seleccionar activos correctamente por su cuenta, mientras que aquellos que no se sientan seguros pueden recurrir a un intermediario financiero para recibir asesoramiento.
MÉXICO.- Juan Manuel Verón, director de Inversiones de Principal Financial Group, advierte sobre la importancia de seguir de cerca la divergencia del crecimiento a nivel mundial al seleccionar activos.
Es fundamental tener en cuenta que el riesgo está relacionado con la clase de activos en los que se invierte. Por ejemplo, invertir el 50% del portafolio en bonos del Tesoro de Estados Unidos o Suiza se considera una inversión conservadora, mientras que asignar ese monto a mercados de países emergentes implica una posición más especulativa. | pexels
Los inversionistas con conocimientos suficientes pueden hacerlo por su cuenta, mientras que aquellos que no se sientan seguros pueden recurrir a un intermediario financiero para recibir asesoramiento.
Si su tolerancia al riesgo no le permite adoptar una postura agresiva en sus inversiones en este momento, los expertos sugieren considerar instrumentos a largo plazo con bajos riesgos y alta liquidez.
La diversificación y el horizonte de inversión a largo plazo son reglas fundamentales para los inversionistas en la situación actual. La diversificación implica combinar diferentes activos en el portafolio, teniendo en cuenta la estabilidad de la economía global.
Aunque la situación económica actual no es la más favorable, todavía es posible invertir en instrumentos de bajo riesgo, ya que se esperan momentos de divergencia económica debido al próximo aumento de la tasa de referencia en Estados Unidos. Verón recomienda prestar atención a este cambio de ciclo monetario y estar preparado para posibles fluctuaciones repentinas en el mercado.
En momentos como estos, es recomendable priorizar la seguridad sobre los rendimientos. Es aconsejable optar por activos seguros y líquidos, incluso si no generan ganancias significativas. Comparando dos inversiones: una segura que garantiza la recuperación del capital y otra que puede generar mayores rendimientos pero también implica más riesgo, es preferible elegir la seguridad para proteger su dinero.
En cuanto al horizonte de inversión, se recomienda optar por plazos largos, ya que esto no solo puede generar mayores rendimientos, sino que también brinda tiempo al portafolio para recuperarse de movimientos bruscos en el mercado bursátil.
Una estrategia recomendada por los expertos es diversificar parte del portafolio en el mercado local y parte en el internacional. Dependiendo del perfil y horizonte de inversión, se puede asignar entre el 40% y el 50% a instrumentos globales, mientras que el resto se diversifica a nivel local.
Si bien los activos de renta fija pueden no ser la mejor opción en este momento, se sugiere considerar certificados de capital de desarrollo o fideicomisos de inversión en bienes raíces, en espera de un crecimiento sostenido.
En relación a la volatilidad del tipo de cambio, aunque es recomendable tener una parte del portafolio en una moneda fuerte como el dólar, adquirir instrumentos en esta moneda puede resultar costoso en la actualidad. Por lo tanto, los expertos sugieren que el Sistema Internacional de Cotizaciones (SIC) de la Bolsa Mexicana de Valores sea una opción para encontrar productos internacionales sin necesidad de operaciones de cambio o cuentas en el extranjero.
En el SIC, se encuentran listados diversos instrumentos financieros de todo el mundo, incluyendo opciones con cobertura de moneda. Combinar estos activos con los locales puede proporcionar un portafolio bien diversificado.
Aunque es recomendable tener una parte de la inversión en el extranjero, no se aconseja colocar todos los activos de esta manera. En el mercado local existen oportunidades para obtener rendimientos similares sin asumir altos riesgos, a través de fondos de inversión vinculados a mercados internacionales.
En última instancia, si desea evitar el riesgo del mercado internacional, puede optar por fondos que invierten en instrumentos que replican el mercado de acciones de otros países, los cuales requieren montos más pequeños de capital.
Es fundamental tener en cuenta que el riesgo está relacionado con la clase de activos en los que se invierte. Por ejemplo, invertir el 50% del portafolio en bonos del Tesoro de Estados Unidos o Suiza se considera una inversión conservadora, mientras que asignar ese monto a mercados de países emergentes implica una posición más especulativa.
En un entorno global lleno de incertidumbre, los inversionistas deben evaluar cuidadosamente su perfil de riesgo, su horizonte de inversión y buscar asesoramiento financiero para tomar decisiones informadas y proteger su capital en un escenario volátil y en constante cambio.
Fuente: Principal Financial Group