Las ventajas del equilibrio laboral y personal no sólo benefician a los empleados, quienes pueden reducir el estrés, sino también a los empleadores que ganan colaboradores más leales, productivos y con menor ausentismo
MÉXICO.- Ofrecer un equilibrio laboral es una de las claves para motivar y retener a los colaboradores en las empresas, señaló la coordinadora de la Licenciatura en Administración de Empresas de Cetys Universidad, campus Mexicali, Alma Hernández Alvarado.
Las ventajas del equilibrio laboral y personal no sólo benefician a los empleados, quienes pueden reducir el estrés, sino también a los empleadores que ganan colaboradores más leales, productivos y con menor ausentismo.
La medida para la conciliación entre ambos roles de vida es cuestión de percepción de cada empleado, porque hay quienes requieren más flexibilidad y otros un horario más extenso, explicó la experta, por lo que es importante fomentar el equilibrio mediante las áreas de recursos humanos.
Se habla de encontrar el equilibrio entre su vida laboral y su vida personal, como si ambas existieran por separado, cuando la realidad es que son diferentes roles que coexisten a la par. Si hay algo que valoran todos los empleados, sin importar su cargo y su salario, es un trabajo que les permita tener un balance entre su vida laboral y personal”, expresó Hernández Alvarado.
El equilibrio es la relación proporcional del número de horas que trabajan las personas, en comparación con el tiempo que destinan a actividades como el ocio y cuidado personal, mencionó la coordinadora de la Licenciatura en Administración de Empresas.
La experta sugirió algunas estrategias, aunque el balance personal y laboral puede significar distintas cosas para cada trabajador, y son las siguientes:
- Prioriza y organiza tiempo para hacer las actividades. Una forma de encontrar el equilibrio entre lo laboral y lo personal, es priorizar tus actividades y distinguir entre las necesarias y las prescindibles. Así podrás identificar cuáles son las tareas verdaderamente importantes y a cuáles no deberías dedicarles más que unos minutos de tu tiempo.
- Comienza con pequeñas acciones. Si buscas el balance, requieres adquirir nuevos hábitos, pero debes hacerlo poco a poco. Lo mejor es visualizar la tarea completa y dividirla por partes, para posteriormente comenzar a cumplirlas hasta llegar a la meta.
- Recuerda no buscar la perfección. Al hablar de un balance laboral y personal, es posible imaginar un día extremadamente productivo, salir temprano y disfrutar del resto de la tarde. Sin embargo, no siempre es así, entre cada semana el tiempo libre y el del trabajo pueden variar, por lo que habrá que adaptar cambios constantes para conseguir las metas.