Viviendas y terrenos desocupados: Riesgos y fraudes inmobiliarios

La importancia de regularizar la propiedad para evitar situaciones de riesgo y estafas

MÉXICO.- Cuando las personas dejan sus viviendas o terrenos desocupados durante largos períodos, pueden surgir varios factores que contribuyen a esta situación.

Algunos de los motivos principales incluyen el cambio a una nueva vivienda, la rotación de ocupantes, la compra de propiedades como inversión y los problemas legales como juicios sucesorios que no han sido resueltos debido a la falta de testamento o disputas entre propietarios.

Sin importar la razón, dejar una vivienda o terreno desocupado por un tiempo considerable siempre conlleva un riesgo, ya que incentiva prácticas de paracaidismo y fraudes inmobiliarios por parte de personas que buscan aprovecharse de la situación vulnerable de los propietarios.

El paracaidismo ocurre cuando alguien ocupa un edificio, casa o terreno vacío sin la autorización del propietario. Esta práctica se ha vuelto común en las grandes ciudades, donde familias y grupos enteros se apropian ilegalmente de inmuebles ajenos.

Esta situación plantea un problema social significativo, ya que afecta la plusvalía de la propiedad y genera cinturones de miseria y corrupción, según el Colegio Nacional del Notariado Mexicano.

La invasión de propiedades es un delito conocido como despojo y se castiga con prisión. Si alguien se enfrenta a esta situación, puede acudir a las autoridades para denunciar el delito. Sin embargo, recuperar la propiedad requerirá un proceso judicial que puede llevar tiempo y ser costoso debido a los honorarios de abogados.

Existen diversas modalidades de fraudes inmobiliarios, que van desde la venta múltiple de una propiedad hasta la transferencia de dominio mediante suplantación de identidad, donde una persona vende un inmueble utilizando documentos falsos.

El Colegio Nacional del Notariado Mexicano destaca que los fraudes inmobiliarios se han vuelto comunes debido a la evolución de las técnicas utilizadas por los estafadores y al mal uso de la tecnología, que puede ser utilizada por los criminales para cometer estos delitos.

Es importante resaltar que la mejor protección para evitar el despojo de un patrimonio es regularizar los documentos de propiedad. Lamentablemente, pocas personas consideran y llevan a cabo este proceso.

Según la Encuesta Intercensal realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en México el 67.7% de las viviendas son propiedad de sus habitantes. 

De ese porcentaje, el 31.3% carece de escrituras a nombre de los ocupantes, ya sea porque la vivienda está registrada a nombre de alguien que no vive allí (17.1%) o porque no ha sido escriturada y los propietarios desconocen si existe una escritura (14.2%).

No contar con escrituras representa un riesgo, ya que los contratos privados o los poderes no son soluciones legales sólidas, según el presidente del colegio, Héctor Galeano Inclán.

La escrituración de un inmueble es la única forma de obtener certeza jurídica sobre la propiedad ante terceros, incluyendo a los paracaidistas que intenten apropiarse ilegalmente del inmueble.

Para evitar estafas de este tipo, es fundamental que todos los involucrados en el proceso de compra y venta de una propiedad, incluyendo compradores, vendedores, intermediarios, autoridades y notarios, trabajen juntos para descubrir las trampas de estas personas. Cuantas más medidas se tomen para prevenir los fraudes, mayor tranquilidad habrá para todos.

Nadie valora su patrimonio tanto como usted mismo, pero la ayuda de un notario puede ser de gran utilidad. Un notario puede convertirse en un buen aliado para proteger su inmueble, por lo que es recomendable buscar su asesoramiento para mantener su patrimonio protegido en todo momento.

El primer paso para regularizar una propiedad es revisar su situación actual. Para hacerlo, se debe buscar a un notario y proporcionarle toda la información disponible sobre la vivienda, como la existencia de escrituras a nombre del propietario, si la propiedad fue heredada sin realizar el trámite correspondiente o si se firmó un contrato privado o un poder al adquirir la vivienda. Es importante mantener contacto con la persona con la que se firmó el contrato privado o poder, si es el caso.

Los pasos a seguir, el tiempo y los costos para regularizar la propiedad dependerán de cada caso particular. En muchos casos, será necesario iniciar un juicio para obtener y firmar las escrituras o llevar a cabo un juicio sucesorio para demostrar la propiedad.

En resumen, es esencial regularizar la propiedad de viviendas y terrenos para evitar situaciones de riesgo como el paracaidismo y los fraudes inmobiliarios. 

La escrituración de un inmueble brinda certeza jurídica y protección ante posibles intentos de despojo. La ayuda de un notario puede ser valiosa en este proceso, y es importante que todas las partes involucradas trabajen juntas para prevenir fraudes y mantener la tranquilidad en el mercado inmobiliario.

Fuente: Inegi y Colegio Nacional del Notariado Mexicano

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