Expertos señalan que inculcar el hábito del ahorro y la inversión desde temprana edad es fundamental para el desarrollo económico y la prevención de la pobreza
MÉXICO.- De acuerdo con el último informe de inclusión financiera, en México solo el 58% de los adultos ha ahorrado durante el último año, una cifra baja en comparación con la media de los países miembros de la OCDE, que se sitúa cerca del 71%.
Expertos advierten que fomentar el ahorro y la inversión desde edades tempranas es clave para impulsar la economía y evitar la pobreza en el futuro.
Investigaciones realizadas por el Banco Mundial respaldan cada vez más la idea de que el acceso al sector financiero a través de cuentas formales permite a las personas y empresas normalizar el consumo, administrar riesgos e invertir en educación, salud y emprendimientos, lo que a su vez contribuye a salir de la pobreza.
En este contexto, José Ballesteros González, director de Ventas de Títulos en Cetesdirecto, destaca la importancia de fomentar desde la niñez el hábito del ahorro y la inversión. Según Ballesteros, los niños absorben conocimientos fácilmente y ponerlos en práctica refuerza estas actividades financieras.
Es crucial que los niños desarrollen una conciencia del valor del dinero, comprendan la importancia del esfuerzo y la constancia para obtenerlo. Ahorrar dinero (e invertirlo) genera ciertos intereses, pero es la repetición del ahorro constante lo que realmente puede llevar a resultados significativos.
La intención de Cetesdirecto es trabajar junto con los padres para que el hábito de guardar dinero, estableciendo metas a corto, mediano y largo plazo, se arraigue en los niños y evite el gasto innecesario de los ingresos que obtienen a través de tareas domésticas o buenas calificaciones.
Los padres deben enseñarles que al guardar pequeñas cantidades de dinero, poco a poco pueden alcanzar grandes objetivos", comenta el director.
Cetesdirecto Niños es una herramienta diseñada para planificar el futuro de los más pequeños y ayudarles a cumplir gradualmente metas financieras. Esto implica adquirir conocimientos financieros que, a su vez, mejoran la situación económica que se les ha brindado.
¿Cómo funciona? El primer paso consiste en determinar cuándo se necesita que el dinero esté disponible nuevamente. Con base en esa respuesta, el niño y sus padres pueden decidir qué portafolio se adapta mejor a sus objetivos.
A través de este instrumento de inversión, se evita el ahorro informal que a largo plazo puede afectar las finanzas personales. Las cuentas de Cetesdirecto Niños permiten inversiones desde 10 pesos, aunque se recomienda iniciar con 100 pesos.
El padre puede abrir una cuenta y aprovechar las ventajas de Cetesdirecto, como la ausencia de comisiones y la garantía de que son títulos gubernamentales. Juntos, los padres y los niños pueden consultar el saldo y su crecimiento.
Existen diversos instrumentos de inversión adaptados a diferentes objetivos. Los instrumentos a corto plazo, como los Cetes, pueden destinarse a la compra de un videojuego, un juguete o una bicicleta.
Los instrumentos a mediano plazo, como los bonos, Bondes y Udibonos, son ideales para que los niños ahorren y paguen unas vacaciones en el extranjero o cursos extracurriculares.
Por último, los instrumentos a largo plazo, como los bonos y Udibonos, están pensados para que los niños ahorren y financien su educación universitaria en la institución de su elección.
Los depósitos en estas cuentas de ahorro pueden realizarse a través de computadoras, dispositivos móviles o por vía telefónica.
Aunque las cuentas están dirigidas a los niños, los padres son los titulares. Para abrir una cuenta, es necesario contratar Cetesdirecto y luego crear una subcuenta en la cual se designe al menor como beneficiario. Los datos requeridos del menor son su nombre, fecha de nacimiento y CURP.
En resumen, fomentar el ahorro desde la infancia es fundamental para establecer bases financieras sólidas a lo largo de la vida.
Cetesdirecto Niños brinda herramientas didácticas para planificar el futuro de los pequeños y alcanzar metas financieras, lo que se traduce en conocimiento financiero y en una mejora de su situación económica.
Inculcar hábitos financieros saludables desde temprana edad es una inversión valiosa para el desarrollo económico y la prevención de la pobreza.