De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), los centennials ven en el emprendimiento una alternativa para crear sus propias fuentes de ingreso y no ser un empleado
MÉXICO.- Los centennials, también conocidos como la generación “Z”, nacidos entre 1995 y 2010, prefieren emprender y no atarse a un empleo, pero ¿qué los lleva a tomar esa decisión?
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), los centennials ven en el emprendimiento una alternativa para crear sus propias fuentes de ingreso y no ser un empleado.
Por estas razones a los Centennials no les gusta atarse a un empleo
Los jóvenes de la generación “Z”, tienen como principal característica el hecho de ser nativos digitales, por lo que siempre están conectados a las redes sociales y debido a ellos son creativos, competitivos, emprendedores y evitan estar sujetos a un horario de oficina.
Según la Condusef, otra característica que define a los centennials es que utilizan la capacitación de sus empleados como una herramienta para enfrentar los retos venideros, además de sentir gran satisfacción de tener incidencia en la actividad económica del País.
Esto significa que según el estudio “Emprendedores y empresas postpandemia: Alcances y retos del nuevo rostro de la economía mexicana”, el 67% de los emprendedores son muy felices de liderar su propio negocio.
Es decir que además ponen énfasis en su bienestar personal, sus relaciones de trabajo, la capacitación y adiestramiento, así como el cuidado del equilibrio entre trabajo y familia, revela el estudio.
Otra de las causas que llevan a los jóvenes a preferir el emprendimiento, es la difícil situación laboral de México, los problemas de inserción laboral y los bajos salarios que ofrecen las empresas.
Según la Encuesta Nacional de Egresados 2021, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 43% de los jóvenes que encontraron trabajo lo hicieron con un sueldo de entre 3 mil a 8 mil pesos y el 44.9% de ellos fueron contratos sin prestaciones.