Muchas veces, los más pequeños de la casa pueden hacer preguntas de este estilo. En lugar de evadir estas preguntas, pueden ser un gancho para aumentar su curiosidad en el ámbito financiero
MÉXICO-. En el hogar, la curiosidad de los más pequeños puede ser un recurso invaluable para introducir conceptos fundamentales sobre el ámbito financiero y fomentar una comprensión más profunda de cómo funcionan las finanzas desde una edad temprana.
A menudo, los niños plantean preguntas aparentemente simples pero profundas, como por qué los productos tienen un costo, por qué nada es gratis o por qué los servicios tienen un precio.
En lugar de evadir estas interrogantes, los padres y educadores pueden utilizarlas como un gancho para aumentar la curiosidad de los niños en el ámbito financiero.
Aprovechando las preguntas para aprender
Las preguntas de los niños, como ¿Por qué nada es gratis y los servicios cuestan?, brindan una oportunidad única para enseñarles sobre la realidad económica que sustenta la sociedad.
En este sentido, se pueden abordar conceptos como el valor del trabajo, la oferta y la demanda, y la importancia de la reciprocidad en la economía.
- Enseñar sobre el valor del trabajo
Se puede explicar a los niños que detrás de cada producto o servicio hay esfuerzo y trabajo dedicado por parte de las personas.
Esto puede ayudarles a comprender por qué no todo puede ser gratuito y cómo el trabajo tiene un valor.
- Introducir conceptos de oferta y demanda
A través de ejemplos simples, los niños pueden entender cómo la disponibilidad y la demanda influyen en los precios.
Podrían relacionar conceptos cotidianos, como por qué los juguetes pueden ser más caros en ciertas épocas del año.
- Fomentar la reciprocidad
Explicar la importancia de la reciprocidad puede ayudar a los niños a comprender que, al recibir un servicio o producto, es justo que haya un intercambio justo. Este principio sienta las bases para la comprensión de transacciones y acuerdos equitativos.
Aprovechar la curiosidad innata de los niños para explorar el mundo financiero no solo enriquece su conocimiento, sino que también sienta las bases para una relación más saludable con el dinero a medida que crecen.
La enseñanza temprana sobre el valor, la reciprocidad y la economía contribuye al desarrollo de habilidades financieras sólidas que serán beneficiosas a lo largo de sus vidas.