Las últimas consolas de videojuegos superan los 10 mil pesos
MÉXICO.- Los videojuegos se han convertido en una fuente de ingresos para muchos, pero para otros un fuerte gasto para sus bolsillos.
Adquirir un videojuego resulta difícil para los jugadores por sus altos costos | Unsplash
Tan solo en 2012, en México un título de videojuegos con lanzamiento reciente tenía un costo de 799 pesos, muy alejados de los hasta 1799 pesos que cuestan hoy en día.
De igual forma, las consolas no se quedan atrás en cuanto a los precios altos, pues la Play Statio 5 alcanza valores de 14 mil pesos.
Esto tiene muchas causantes, pues inicia desde la falta de atención por parte de las empresas hacia los mercados de la región hasta la situación económica de cada país.
Fernando Campos, CEO de la tienda de videojuegos digitales Nuuvem en México, menciona que los distribuidores no realizan un proceso de localización apto para el país, lo que origina que los precios en consolas o nuevos títulos de juegos cuesten lo mismo o un poco más que en Estados Unidos.
Los videosjuegos son más costosos en México
Los precios dentro de la industria se rigen en base al valor del dólar estadounidense y conforme más se devalúe el peso mexicano, más costosos serán, esto por la comercialización que existe entre estos dos países.
Por su parte, en Europa no se observa este comportamiento por no depender del dólar, sino del precio del euro como tal.
A pesar de que México es el segundo país con mayor crecimiento de jugadores en América Latina con 45.3 millones de gamers, solo por detrás de los 53.3 millones de gamers en Brasil, no existe un interés por tomar en cuenta las condiciones económicas del país ni sus características de mercado para adaptar de una forma más congruente sus precios.
Un ejemplo de esto, es la tienda de PlayStation en línea, en donde sus títulos digitales están disponibles únicamente en dólares.
Aunque las compañías de videojuegos buscan una solución para ayudar a sus usuarios con suscripciones mensuales que les brindar acceso a enormes catálogos de juegos sin necesidad de adquirirlos en su precio completo, los últimos lanzamientos no se incluyen, lo que no le deja más opción al consumidor a comprar el título en su más alto costo.