Existen dos tipos de sobreendeudamiento, de acuerdo con Santander, que es el pasivo, que ocurre por situaciones inesperadas, como la pérdida del trabajo y otro es activo, que es cuando se asumen deudas superiores a la capacidad de pago
MÉXCO.- Muchas personas recurren a los créditos para cumplir con sus obligaciones, lo que no está mal, el problema es cuando se cae en el sobreendeudamiento y ni siquiera lo notan.
Existen dos tipos de sobreendeudamiento, de acuerdo con Santander, que es el pasivo, que ocurre por situaciones inesperadas, como la pérdida del trabajo y otro es activo, que es cuando se asumen deudas superiores a la capacidad de pago.
¿Cómo identificar que estás sobreendeudado?
Aunque podría parecer obvio, si el dinero no te alcanza para cubrir todos tus gastos y deudas, puede haber sesgos financieros que impiden que seas consciente de tus malas decisiones financieras.
Santander, comparte las siguientes señales de alarma que te pueden ayudar a identificar este problema y son los siguientes:
- Falta de liquidez
Si al ir al super, a cargar gasolina o para cubrir cualquier gasto recurrente debes usar las tarjetas de crédito o préstamos, es una señal de que estás sobreendeudado.
- Pago de una obligación con otra
Solicitar adelantos en efectivo o recurrir a préstamos para pagar la mensualidad de una tarjeta o cualquier otra deuda, es otra mala señal.
- Retraso o incumplimiento
Si no puedes pagar a tiempo tus deudas porque no tienes para hacerlo en el momento indicado, esto significa que tus deudas te superan.
- Desequilibrio en las cuentas
Si no puedes cumplir con metas financieras como ahorrar, significa que tus cuentas están en desequilibrio, lo que puede deberse al sobreendeudamiento.
¿Cómo afrontar el sobreendeudamiento?
Una vez que se detecte el problema, es indispensable comenzar a actuar para equilibrar las finanzas personales, lo que tendrá un impacto positivo incluso en la salud.
Santander recomienda las siguientes acciones para superar el exceso de deudas:
No adquieras más deudas. El primer paso es reducir o eliminar incluso, el uso de tarjetas de crédito y préstamos, porque esto sólo terminará por complicar más la situación.
Elimina gastos innecesarios. Al tratarse de reducir obligaciones, es un paso sumamente necesario examinar los gastos para definir cuáles recortar, por lo menos durante cierto tiempo.
Diseñar un plan de pagos. Se debe elaborar un calendario teniendo en cuenta las fechas de vencimiento de los pagos y los ingresos actuales. Así sabrás cuánto dinero de tus ingresos necesitas para cumplir con tus obligaciones financieras.