En México existe una gran diversidad de tarjetas de crédito que manejan los bancos, que con las convencionales, como la Clásica, Oro y Platino, pero también hay unas más exclusivas y especializadas
MÉXICO.- Posiblemente en algún momento te hayan ofrecido una tarjeta de crédito, que se aprueba casi al instante, lo que podría parecer una buena opción especialmente para quien inicia en el mundo financiero, pero se corre el riesgo de comenzar un desequilibrio.
Este tipo de tarjetas con como los diamantes del mundo financiero, ya que evocan lujo y exclusividad | Unsplash
En México existe una gran diversidad de tarjetas de crédito que manejan los bancos, que con las convencionales, como la Clásica, Oro y Platino, pero también hay unas más exclusivas y especializadas.
Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), ejemplos de estas tarjetas son las blindadas, que brindan mayor seguridad para realizar transacciones, o las viajeras, diseñadas específicamente para quien disfruta de viajar.
Este tipo de tarjetas con como los diamantes del mundo financiero, ya que evocan lujo y exclusividad, las cuales son incluso símbolo de estatus y acceso a experiencias únicas.
Tarjetas como las Platino y similares, ofrecen privilegios excepcionales, como acceso a un servicio de élite personal, programas de lealtad exclusivos y ofertas especiales en hoteles y restaurantes de lujo.
Sin embargo, todo tiene un costo y estas tarjetas suelen tener cuotas anuales que podrían parecerse al gasto que haces por la renta de un inmueble y para que te des una idea, la Condusef comparte algunos ejemplos de ellas:
- HSBC, tarjeta HSBC Titanium: Anualidad sin IVA 22 mil pesos
- Scotiabank, tarjeta Scotiabank Infinite: Anualidad sin IVA 20 mil pesos
- Citibanamex, tarjeta Citibanamex Beyond: Anualidad sin IVA 20 mil pesos
- Bancoppel, tarjeta Bancoppel Infinite: Anualidad sin IVA 10 mil pesos
- Santander, tarjeta World Elite: Anualidad sin IVA 6 mil pesos
Según la autoridad estas tarjetas pueden ser tentadoras por los beneficios adicionales que otorgan, pero antes de solicitar una, debes evaluar si los costos que generan se alinean a tus necesidades y estilo de vida.