Factores psicológicos y neurológicos influyen en el comportamiento financiero de las personas
MÉXICO.- En México, el endeudamiento excesivo se ha convertido en un fenómeno común que afecta a muchas personas.
Según estimaciones, aquellos con deudas pendientes tienen un promedio de 2.9 veces su salario mensual como deuda, lo que ha llevado a la necesidad de buscar reducciones y renegociaciones para hacer frente a esta situación.
¿Pero qué impulsa a las personas a gastar más de lo que ganan? Según expertos en psicoanálisis y neuropsicología, existen diversos factores que influyen en este comportamiento financiero autodestructivo.
Uno de los factores clave es la búsqueda de alivio y evasión de la ansiedad y el malestar que provoca la deuda.
Al gastar más, las personas experimentan una sensación temporal de bienestar y evitan enfrentar la realidad de su situación financiera. Sin embargo, esta negación puede llevar a un ciclo continuo de endeudamiento.
El principio del placer también desempeña un papel importante. Buscamos la satisfacción inmediata de nuestros deseos y necesidades, incluso cuando nos encontramos en una situación económica difícil.
Esta búsqueda de gratificación instantánea, impulsada por la falta de autocontrol y la incapacidad de posponer la gratificación, dificulta la toma de decisiones financieras responsables.
Además, el endeudamiento excesivo puede estar relacionado con la construcción de una identidad o una imagen específica. La sociedad y los medios de comunicación nos han convencido de que ciertos objetos o un estilo de vida particular nos harán más valiosos o exitosos.
Como resultado, algunas personas se endeudan para cumplir con estas expectativas o mantener una imagen determinada, buscando validación externa y pertenecer a un grupo social.
La presión social y el llamado "efecto manada" también influyen en el comportamiento de gasto. Sentimos la necesidad de gastar o adquirir ciertos productos para encajar en un grupo o cumplir con las normas sociales.
La activación de circuitos neuronales relacionados con la imitación y la conformidad nos impulsa a gastar más, en busca de aprobación social y evitando la exclusión.
Sin embargo, detrás de estos comportamientos subyacen problemas emocionales y psicológicos. Por ejemplo, una persona que experimenta depresión puede buscar alivio temporal a través del gasto compulsivo, sin considerar las consecuencias a largo plazo.
Desde la perspectiva de la neuropsicología, se ha demostrado que el procesamiento de recompensa en el cerebro humano juega un papel fundamental.
Nuestro cerebro está programado para buscar recompensas y experimentar placer cuando realizamos una compra deseada.
Esto se debe a la liberación de neurotransmisores como la dopamina y la serotonina, que generan sensaciones de satisfacción y reducen el dolor.
En resumen, el endeudamiento excesivo es un fenómeno complejo que se ve influenciado por factores psicológicos y neurológicos.
Mecanismos de defensa, el principio del placer, la identidad y la presión social son solo algunos de los aspectos que contribuyen a este comportamiento financiero.
Es fundamental buscar el apoyo de profesionales especializados en finanzas personales y psicología para abordar las circunstancias individuales y promover decisiones financieras responsables.